Han visto... siempre me gustó la historia antigua. Bien antigua. Y de ésta, la egipcia en especial. Pero la más antigua. Bien antigua. De ser posible, previa a la unificación. Y no de Italia.
Bueno, qué va... hemos tenido la suerte de poder tender un puente entre el Piemonte y el Antiguo Egipto, sin necesidad de grandes obras ni pilotes sobre tierras y aguas... Todo gracias a la Tumba de Phaeton Heridanus (Fetonte, para los amigos).
San Dalmazzo se yergue donde una vez hizo lo propio la Iglesia de San Pietro Monacarum... ¿Por que traigo a cuenta esto? Porque de acuerdo con Antonio Astessano, en esta construcción anterior era posible ver la tumba de Fetonte, a quien se le atribuye, nada más y nada menos, el carácter de fundador legendario de la ciudad de Turín.
Si la historia actual no acepta para Turín una antiguedad superior a los 2.000 años, no sucede lo mismo con los historiadores medioevales y algunos más recientes inspirados por los antiguos, que le daban como mínimo 1.500 años más. Tal el caso de Boccaccio, que en su escrito, Genealogía de los Dioses, menciona a Eridano (Fetonte) como fundador de esta Ciudad.
Más adelante en el tiempo, tenemos a Stanislao Bardetti que en su obra De' primi abitatori dell'Italia, opera postuma (1769), afirma que los más antiguos habitantes del Piemonte fueron los taurini, grupo pariente de los ligures. Esos taurini habrían sido los pueblos que colonizó Fetonte, bastante antes de que llegaran los galos-celtas a combatir contra los etruscos, que son a el pueblo al que la historia oficial reconoce, con limitaciones, como más antiguos habitantes de la zona.
Unos cien años antes tenemos la Historia dell'augusta città di Torino, escrita por Emanuele Tesauro (1679) que también atribuye a los egipcios, en la figura de Eridano, la fundación de la ciudad de Torino.
Como señala Danilo Tacchino en su libro Torino. Storia e misteri di una provincia magica, el mito de Erídano está presente en la obra de varios autores: desde Aristótoles y Plutarco, hasta Astessano y Tesauro.
¿Qué dice la leyenda?: Fetonte era hijo de Elios (el Sol) y de Climene (hija de Océano). Al parecer algunos amigos de Fetonte no creían en que su padre era el Sol, así que aquél no tuvo mejor idea que pedir a papá que le prestara el carro solar por un día. Papá Sol accedió y Fetonte salió a pasear en carro por sobre la tierra. Poco acostumbrado a la tarea, primero Fetonte voló muy alto, por lo cual la Tierra se enfrió. Pero luego se acercó demasiado, en vuelo rasante, y la Tierra ardió. Ante esto a Elios no le quedó más remedio que frenar el carro con un rayo. Como consecuencia, Fetonte cayó a las aguas de un río... y se ahogó.
El río en el que la leyenda cuenta, cayó Fetonte, es el río Erídamo, nombre con el que los griegos conocían el tramo superior del Po (Padania)...
Ahora: sí abonáramos la teoría de Albert Slosman, es claro que este post no debiera intitulares "Nuestros antepasados egipcios", sino más bien "Nuestros antepasados atlantes". Pero me pareció como demasiado...
A estas alturas creo que debo pedir disculpas a los que ingresan al blog pensando que Nuestra familia en el mundo es un blog genealógico en un sentido tradicional. No es el caso.
Para lo que valga, me disculpo diciendo: es bueno echarle un vistazo a estas versiones no oficiales de la historia. Nos permiten sacudirnos el polvo. Ver con otros ojos las mismas cosas. Si este post tiene algo de valor genealógico debe pasar por el intento de resaltar la importancia de la historia no oficial que transmiten las familias, de generación en generación. El resto: simples convenciones para mantener el statu quo.
La imagen que acompaña este post la agradecemos a Augusta Taurinorum. Corresponde a un grabado de Antonio Caron que representa el acto fundacional de la Ciudad de Torino (según el mito).
Tenía que hacer un trabajo de los antepasados egipcios y la verdad es que esta información me ha servido de mucho, muchas gracias.
ResponderEliminarAlbricias!!
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